El desplome de las remesas de inmigrantes en España ya se siente en América Latina

Actualidad

El aviso que el Banco Mundial hiciera el pasado 22 de abril ya es una realidad confirmada en vario países latinoamericanos: las remesas han caído en picado en el primer semestre de 2020 debido a las crisis económica derivada de la crisis sanitaria del coronavirus.

Valgan como ejemplo los datos del Banco de la República de Colombia y del Banco Central de Bolivia que muestran como el dinero que proviene de los trabajadores en el extranjero ha caído en más del 60%, en el primer caso, y un 14 % en el segundo.

Estas cifras respaldan los cálculos presentados por el Banco Mundial que prevé un descenso del 19,3 % en el envío de dinero desde países desarrollados a América Latina y de un 20 % a nivel mundial. Para el ente financiero, la caída  es “la más abrupta de la historia reciente” y se debe “en gran parte al desplome de los salarios y el empleo de los trabajadores migrantes” por el cierre de empresas debido a las medidas de restricción de movimiento y productividad.

Estos datos difieren de la llegada de remesas a América Latina y el Caribe en 2019, año en que creció un 7,4 %, alcanzando los 88.987millones de euros con Brasil, Guatemala y Honduras a la cabeza con un 12 % de incremento. Les siguen Colombia, Ecuador, Nicaragua y Panamá con un 6 % dejando al final a Bolivia y Paraguay que redujeron el flujo de dinero un 3,8 % y 2,2 % respectivamente.

A todo lo anterior hay que sumar que por la crisis de la COVID19, los costos de transferir remesas a la región podrían elevarse debido a las dificultades operativas que enfrentan los proveedores de estos servicios (cierre de agentes y de oficinas, acceso al dinero en efectivo, tipo de cambio, seguridad) y al cumplimiento de las normas contra el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.